• Vista de la parte lumbar durante un intervención para la inserción de plasma rico en plaquetas interdiscal. Se ve una mano de una cirujano con guantes verdes sosteniendo una aguja haciendo una punción sobre la zona lumbar.

Plasma rico en plaquetas intradiscal

El dolor lumbar es una condición médica muy común que afecta a un gran número de personas en todo el mundo. Según las estadísticas, aproximadamente entre el 60% y el 85% de la población experimentará dolor lumbar en algún momento de sus vidas.

La enfermedad discal degenerativa es un proceso crónico que conlleva una importante discapacidad y dependencia. A medida que el disco intervertebral se deteriora, pierde sus cualidades y disminuye en altura, lo que aumenta la presión en las articulaciones posteriores de las vértebras, también conocidas como facetas.

La degeneración discal puede afectar el día a día de una persona de varias maneras.

El dolor crónico en la región lumbar dificulta actividades como levantarse de la cama, caminar o estar de pie. También puede limitar la capacidad para trabajar, hacer ejercicio y disfrutar de actividades sociales. El uso de medicamentos para el dolor puede generar dependencia y efectos secundarios.

Además, el impacto emocional puede incluir depresión, ansiedad y disminución de la calidad de vida.

Vista de la parte lumbar en la que se ven varias agujas clavadas en la zona y sobre una de ellas una inyección cargada con plasma rico en plaquetas que va a ser inyectada en la zona afectada.

Tratamiento PRP intradiscal

El plasma rico en plaquetas (PRP) se utiliza como una opción de tratamiento prometedora en la enfermedad discal degenerativa y se ha establecido como un tratamiento seguro, eficaz y viable. El tratamiento con PRP consiste en la extracción de una muestra de sangre del paciente, que luego se procesa para concentrar las plaquetas y factores de crecimiento presentes en ella.

Esta solución concentrada se inyecta en la región afectada de la columna vertebral. Este procedimiento se realiza de forma ambulatoria, bajo sedación endovenosa. Después del tratamiento, se recomienda un reposo relativo de 24 horas, seguido de la reanudación de las actividades normales.

El plasma rico en plaquetas se ha utilizado con el objetivo de estimular la regeneración y reparación de los discos intervertebrales dañados. Se cree que los factores de crecimiento presentes en el PRP promueven la proliferación celular, la formación de tejido nuevo y la reducción de la inflamación.

Por lo general, se sugieren tres sesiones de PRP para obtener resultados óptimos. Se ha observado una disminución significativa del dolor a los seis meses de realizado el tratamiento, con menos efectos adversos en comparación con otras terapias disponibles.

Beneficios del tratamiento con plasma rico en plaquetas

La aplicación de PRP ofrece una alternativa eficaz y prometedora para abordar la enfermedad discal degenerativa. Esta terapia busca estimular la regeneración del disco intervertebral y aliviar el dolor asociado, mejorando así la calidad de vida de los pacientes.

En resumen, el plasma rico en plaquetas se posiciona como una modalidad de tratamiento segura y eficaz para el dolor discogénico y la enfermedad discal degenerativa. Con resultados alentadores y menos efectos secundarios en comparación con otras terapias, el PRP brinda una opción terapéutica prometedora para aquellos que sufren de esta condición debilitante.

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