Plasma rico en plaquetas

El Plasma Rico en Plaquetas o PRP, es un tratamiento dentro del marco de la medicina regenerativa que ha tenido un gran impulso los últimos años. Este preparado autólogo se basa en la liberación controlada de distintas señales celulares contenidas en plaquetas que aceleran y optimizan la reparación de los tejidos dañados.

Nuestra sangre contiene glóbulos rojos que son los encargados de transportar el oxígeno desde nuestros pulmones a todos los tejidos del organismo. Así como plaquetas, que son las encargadas de participar en la coagulación y la curación de lesiones. Dentro de estas plaquetas y en menor medida en el suero, encontramos unas proteínas denominadas factores de crecimiento que participan en una cascada de señalización que se activa cuando existe una lesión.

El organismo tiene la capacidad de cicatrizar y/o regenerar después de una lesión (traumática o por enfermedad). De esta forma tenemos cicatrices en nuestra piel, podemos curar una úlcera en la córnea, consolidamos una fractura o curamos el endotelio, la capa interna, de nuestros vasos sanguíneos. Esta capacidad de regenerar se puede ver frenada debido al envejecimiento, las lesiones o las enfermedades y esto acaba causando procesos degenerativos y artrosis. El tratamiento con PRP nos permite estimular o acelerar esta capacidad regeneradora de los tejidos.

Hay diferentes tipos de PRP y pueden tener diferente eficacia. El principal elemento que debemos tener en cuenta es la forma como se obtiene el plasma ya que los diferentes procesos de obtención proporcionan tipos de plasma diferentes y por lo tanto con capacidades diferentes, y su eficacia puede variar.

Actualmente existen dos opciones en las que se puede aplicar el Plasma rico en plaquetas. La primera es en consulta combinado con fisioterapia y/o rehabilitación si se precisan. En segundo lugar, se podrá aplicar en quirófano como complemento a la intervención quirúrgica.

El doctor Cugat y el grupo de investigadores multidisciplinario en la Fundación García Cugat han potenciado diferentes estudios sobre tejidos como el cartílago, los tendones, los ligamentos, sobre articulaciones como la rodilla, tobillo, cadera, hombro o la piel. Estos estudios además de ser el origen de diversas tesis doctorales, han podido ser publicadas en revistas de alto impacto científico.

A raíz de muchos de estos estudios, el Dr. Cugat y el grupo de investigadores han podido desarrollar estudios clínicos en humanos donde poder evaluar la potencia de la eficacia del plasma rico en plaquetas rodilla y en áreas tan importantes como las lesiones de cartílago que llevan a la artrosis o la reconstrucción del ligamento cruzado anterior de la rodilla, tan conocidos por verse afectados deportistas de alto nivel internacional.

Antes de la aplicación de el Plasma rico en plaquetas es importante que advierta a su médico y/o especialista si padece algunas de las siguientes enfermedades, se encuentra en un proceso infeccioso o o toma anticoagulantes.

Estos tratamientos siguen un escrupuloso sistema de obtención que permite no sólo asegurar la esterilidad, al realizarse su manipulación en áreas estériles del Hospital Quirónsalud Barcelona, sino que permite comprobar la trazabilidad desde la extracción del paciente hasta su aplicación tanto de forma ambulatoria como en quirófano en el transcurso de una artroscopia o cirugía abierta.

Una vez que se ha decidido recibir el Plasma rico en plaquetas es importante que antes de la infiltración se compruebe su historial clínico, el estado de su salud en el momento del tratamiento y estar 4 horas en ayuno antes de la extracción de sangre.

Se ha de tener en cuenta que la infiltración no es un proceso doloroso. Durante el tratamiento se puede experimentar sensación de hinchazón durante las 24 y 48 horas. El primer día de la aplicación es importante aplicar hielo en la zona durante unos 5-10 minutos cada 2-3 horas. No debes tomar aspirina, ni ibuprofeno, ni diclofenaco el día del tratamiento como tampoco realizar ejercicio durante las 24-48 horas posteriores.

Diversas cirugías han sido mejoradas con el uso de PRP porque ha demostrado no sólo que favorece una menor inflamación de los tejidos, sino una mayor rapidez en la recuperación de los tejidos donde se aplica esta terapia. La menor tasa de dolor, la mayor rapidez de regenerado permite acelerar muchos de los procesos de recuperación en estos pacientes, no sólo en los deportistas que por razones obvias lo requieren sino en población general que se beneficia de la comodidad y menor uso de medicamentos.

En el caso de que sientas dolor puedes tomar paracetamol o metamizol y siempre ante cualquier duda consultar con el personal sanitario de Instituto Cugat.