¡Qué dolor de cadera!, ¿qué puedo hacer?
El dolor lateral de cadera es una molestia común que afecta a personas de diversas edades y estilos de vida. Este dolor, frecuentemente asociado a la trocanteritis o bursitis trocantérica, suele empeorar al acostarse de lado, caminar largas distancias o subir escaleras.
La trocanteritis es una inflamación que afecta a las estructuras blandas del trocánter mayor del fémur, incluyendo tendones y bursas. Aunque no representa una amenaza grave para la salud, puede afectar significativamente la calidad de vida si no se trata adecuadamente.
¿Tengo realmente trocanteritis?
El diagnóstico de la trocanteritis comienza con una evaluación clínica detallada en consulta, especialmente en pacientes que presentan dolor lateral de cadera persistente. Se debe valorar el historial del paciente, identificando posibles factores desencadenantes, como actividades físicas intensas, traumatismos repetitivos o alteraciones biomecánicas.
Los síntomas clave incluyen dolor localizado en la parte externa de la cadera, que se intensifica al presionar el trocánter mayor o durante ciertos movimientos.
Las pruebas de imagen son útiles para confirmar el diagnóstico y descartar otras patologías. Una ecografía puede revelar inflamación de las bursas o lesiones tendinosas, mientras que una resonancia magnética proporciona una visión más detallada de las estructuras afectadas. Estas herramientas ayudan a diferenciar la trocanteritis de condiciones similares, como artrosis de cadera o síndrome de fricción de la banda iliotibial.
Beneficios de la práctica deportiva y la fisioterapia en el tratamiento del dolor lateral de cadera
El tratamiento inicial de la trocanteritis se centra en enfoques conservadores, con la fisioterapia como pilar fundamental. Los ejercicios terapéuticos ayudan a fortalecer los músculos que rodean la cadera, como el glúteo medio y el glúteo menor, aliviando la sobrecarga en las estructuras inflamadas. Además, el estiramiento adecuado reduce la tensión en los tendones afectados y mejora la movilidad articular.
La fisioterapia incluye también terapias manuales, como masajes y técnicas de movilización, que alivian el dolor y mejoran la circulación en la zona. Modalidades complementarias como ultrasonidos, terapia de ondas de choque o electroterapia pueden acelerar la recuperación al reducir la inflamación y estimular la reparación tisular.
El trabajo físico debe combinarse con modificaciones en el estilo de vida, como evitar actividades de alto impacto, mejorar la postura y utilizar calzado adecuado. La constancia en estas medidas no solo alivia el dolor, sino que previene recaídas.
Cuando el tratamiento conservador no funciona: cirugía endoscópica
En casos donde las medidas conservadoras no logran resolver el problema tras varios meses, la cirugía puede ser necesaria. En el Instituto Cugat, el Dr. Seijas y el Dr. Vázquez utilizan la endoscopia de trocánter para el abordaje de las trocanteritis más complejas. Una técnica mínimamente invasiva que permite tratar la inflamación crónica de las bursas e incluso reparar aquellas lesiones tendinosas asociadas.
El procedimiento se lleva a cabo a través de incisiones milimétricas, minimizando el daño a los tejidos circundantes y favoreciendo una recuperación precoz.
La recuperación tras la cirugía endoscópica es generalmente rápida, y la mayoría de los pacientes puede retomar sus actividades habituales en pocas semanas. Este enfoque ofrece excelentes resultados en términos de alivio del dolor y restauración de la funcionalidad, especialmente en casos complejos o crónicos.
Me han dicho que mi trocanteritis ya no tiene solución
El dolor lateral de cadera, a menudo causado por la trocanteritis, puede ser una experiencia frustrante y limitante. Sin embargo, con un diagnóstico temprano y un enfoque terapéutico adecuado, es posible aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida. Desde el fortalecimiento físico hasta las técnicas quirúrgicas avanzadas, cada paso del tratamiento busca devolver al paciente la comodidad y funcionalidad que necesita para disfrutar de su día a día.
Si experimentas dolor persistente en la cadera que no ha remitido a pesar del tratamiento realizado hasta ahora, no dudes en buscar el consejo de los especialistas de la unidad de cadera del Instituto Cugat.