Artroscopia de cadera en futbolistas

La práctica deportiva aporta a la población unos beneficios generales indiscutibles. Mantener un buen estado físico, ayuda a nuestro sistema cardiovascular a mejorar la función del corazón y el intercambio de oxígeno en los pulmones. El sistema musculo-esquelético también sale reforzado con una práctica regular de deporte. Las articulaciones, los músculos y los huesos en general mantienen un mejor metabolismo con la realización de una práctica deportiva regular.

Pero en ocasiones, la práctica de deporte también nos trae lesiones. Sin duda, las lesiones musculares son las más frecuentes en la mayoría de deportes, con roturas de fibras y las bien conocidas “agujetas” por la mayoría de población que inicia una actividad física.

Los deportes como el fútbol, las artes marciales, hockey, etc., que exigen una flexión y giros de la cadera de una forma repetida pueden darnos problemas en esta articulación. Los practicantes de alta intensidad, o los profesionales de estos deportes, necesitan horas de entreno y competición que producen miles de repeticiones de movimientos que cierran esta articulación mediante la flexión y rotación interna en numerosos ciclos.

Esta situación se puede complicar más en casos de jóvenes en edad de crecimiento durante la pubertad. La realización de estos deportes, puede favorecer en algunos de ellos un mayor crecimiento de unas zonas de la cadera que aumenten esos impactos.

La cadera cuando presenta algunas deformidades como las conocidas en el pinzamiento femoroacetabular de cadera, se produce un impacto en las partes blandas de la articulación que quedan atrapadas, y se produce una rotura progresiva de las mismas. Esto lleva en muchos de ellos a lesionarse también el cartílago de la articulación.

Un correcto diagnóstico y tratamiento de estas situaciones, nos permite evitar una progresión de síntomas como el dolor, la limitación de movilidad por la rigidez y una recuperación de las actividades, tanto del día a día, como las laborales o deportivas.

La artroscopia de cadera es una técnica quirúrgica que utilizamos de forma regular hace décadas, desarrollando y definiendo nuevas patologías, nuevos tratamientos y programas integrales de diagnóstico, tratamiento y recuperación para estas lesiones.